La prevención y detección temprana son herramientas poderosas en la lucha contra el cáncer de mama. Conocer nuestro cuerpo y estar alerta a cualquier cambio es de vital importancia. La autoexploración mamaria es una práctica sencilla y efectiva que todas las mujeres pueden incorporar en su rutina mensual. En esta guía, te enseñaremos cómo realizar una autoexploración, qué señales debes tener en cuenta y por qué este hábito puede marcar la diferencia en tu salud.
Elige el momento adecuado
Frecuencia: Realiza la autoexploración una vez al mes
Mejor momento: Justo después de tu periodo menstrual, cuando los senos están menos sensibles. Si eres postmenopáusica, escoge un día fijo cada mes
Posición
Frente al espejo:
- Ponte de pie y quítate todas tus prendas de la parte superior
- Mira tus senos para verificar cambios en la forma, tamaño, o color
- Asegúrate de que no haya hoyuelos, arrugas o cambios en la piel
Observación
Movimiento de brazos:
- Levanta los brazos por encima de la cabeza y observa si hay cambios en los senos
- Coloca las manos en las caderas y aprieta para observar si hay cambios visibles
Tacto
Mientras te duchas o en la cama:
- Usa las yemas de los dedos para palpar tus senos
- Puedes hacerlo en diferentes patrones: en círculos, de arriba hacia abajo o de lado a lado
- Comienza desde la parte superior y muévete hacia el pezón, cubriendo toda la superficie
Examina el pezón
Pezón y areola:
- Revisa si hay secreción inusual, bultos o cambios en la textura
- También examina la piel alrededor del pezón y la areola
Señales de alerta:
- Bultos o masas inusuales
- Cambios en el tamaño o forma de los senos
- Cambios en la piel (enrojecimiento, hoyuelos)
- Secreción del pezón (si no estás lactando)
- Dolor persistente en un área específica
La lucha contra el cáncer de mama comienza con la conciencia y el conocimiento de tu propio cuerpo. Estar atenta a los cambios y realizar una autoexploración mamaria regular es una herramienta valiosa para detectar cualquier señal de alerta. Sin embargo, estos hábitos deben complementarse con chequeos médicos y mastografías periódicas, ya que solo un profesional puede brindar un diagnóstico preciso. La detección temprana aumenta significativamente las posibilidades de un tratamiento exitoso, por lo que invertir tiempo en tu salud es una de las decisiones más importantes que puedes tomar.
¡Cuídate y no dejes pasar tus revisiones!